Patchwork para jugar

Mis trabajos comienzan cuando decido a quien o donde estarán destinados.

Generalmente a mis hijas, a veces mi casa o al taller cuando quiero coser con paletas de colores absolutamente extrañas y ajenas a la decoración hogareña.

Este trabajo fue para mi esposo. Él está rodeado de mujeres en la casa y sin quererlo, fue condenado a los distintos matices de rosas, naranjas y violetas.

Como mi galán es super futbolero, diseñé una cancha de fútbol. Le hice un almohadón gigante para el respaldar de la cama.

La primera en coserlo en clase fue Nidia, para su nieto varón mayor, quien al verlo le dio otro destino.

Le dice "el partido". Bienvenidas al juego!!

Los jugadores ya salieron a la cancha.
El D.T. da las últimas indicaciones y el juego comienza!!

¿Qué me cuentan del galán? Según su mamá, este potrero textil es su mayor entretenimiento, no hay consola de video juegos que le haga sombra!!
 

Felicitaciones a la Abuela!!

Besos, Marina