Hola costureritas!! Espero que el2011 haya comenzado excelente para todas.
Marina terminó el año extenuada física e intelectualmente, pero pletórica espiritualmente.
Entre los últimos días de diciembre y los cinco primeros de enero, terminó tres patchwork (la parte superior, eh!) y cuenta que van otros en proceso, en su cerebro de feria judicial.
Mi año comenzó de la mejor manera, cosiendo en familia.
Al aire libre, debajo de la glicina.
Victoria y Julieta decidieron hacer comiditas, para jugar luego a las muñecas.
Victoria eligió hacer frutillas, marcó los moldes, recortó y cosió a máquina por primera vez.

Esto de enhebrar una aguja, es una odisea.
Después de insistir un rato, lo logró. ¡Bravo!!

Bastilla, relleno de vellón y casi están a punto para comer.

Hermosas!!! las dos... no?

Julieta haciendo sus primeras puntadas. Ella decidió hacer huevos fritos.
Muy atenta para seguir la línea de corte.

Ahora sí, le tocó hacer la bastilla. Cómo la cosa venía medio despareja, llegó mamá.

Qué bueno tener una mamá de vacaciones, que nos pueda enseñar.
Soy una convencida que la técnica y la prolijidad se practican desde un principio.

Felicísima con sus huevos fritos para jugar a las comiditas en la casita.

Después de esta tarde de trabajo forzado, cómo lo han visto, estoy refeliz que se diviertan cosiendo.
Cómo dice el papá de Sole, "lo que se hereda no se roba".
Gracias por compartir este nuevo espacio. Delfina.